Resumen
Uno de los temas más complejos dentro los estudios feministas y de género, es el de la prostitución y el trabajo sexual por varias razones, por un lado por las dificultades propias de acercarse a conocer, comprender e interpretar un mundo real y simbólico normalmente oculto o semioculto y muy diferente al de las experiencias vitales de los/as investigadores/as, como por los encontrados debates académicos y sociales respecto a este tema, dentro de los cuales también las posiciones feministas están polarizadas. La noción de prostitución ha estado siempre cruzada por preceptos morales, lo que ha impedido que sea vista en todas sus implicaciones. La prostitución es una institución compleja, un producto histórico y social que supone el intercambio de servicios sexuales a cambio de recursos materiales o económicos, lo que implica un acuerdo entre dos partes que es por lo general de corta duración, en el cual no está inmersa la afectividad (Juliano, 2001). Sobre la prostitución se ha construido un discurso oficial que intenta explicar su existencia, el mismo que ha ido perfilando el imaginario social al respecto. Dicho discurso plantea que la prostitución es universal, es decir existe en todas las sociedades y tiene las mismas manifestaciones alrededor del mundo. Surge con la finalidad de satisfacer necesidades humanas (en este caso el deseo sexual masculino), lo que la vuelve inevitable, razón por la cual se la conceptúa como un “mal necesario” de la humanidad, que la tolera a fin de no destruir el tejido social y la moral existentes
| Idioma original | Español (Ecuador) |
|---|---|
| Título de la publicación alojada | VI Encuentro Latinoamericano de Metodología de las Ciencias Sociales |
| Editorial | Universidad Nacional de La Plata |
| Estado | Publicada - 9 nov. 2018 |
Palabras clave
- Sociología
- Prostitución
- Mujeres
- Género